Moscú, 13 de agosto de 1848.
¿Por qué te perdiste? ¿Estás saludable? Pasamos un tiempo difícil. El cólera se desató aquí. Tuve enfermedad y muerte a mi alrededor. La mátushka me asustó fuerte, sólo no con el cólera: con una inflamación que amenazaba gangrena también, y demás. Ahora se recupera. Al tío lo enterré. No se podía aparecerse en la calle, para no encontrar los coches fúnebres, el luto y el enebro. La enfermedad casi ya pasó, pero las noticias sobre las cosechas, los incendios y demás son desoladoras. ¡El signo de los lugares! ¡Y en Europa algo sucede1!
Tuve un refugio y un consuelo: ¡la historia! Trabajo atentamente, y espero terminar de preparar pronto la impresión de los tomos 4, 5 y 6 de la investigación, hasta los tártaros2. Son seis tomos: el fundamento, en particular, y la historia, en la que no habrá ya ninguna investigación, razonamiento o comentario, sino sólo el relato. Me alegra que te gustó el fragmento3. ¿No leíste acaso el anterior, Sviatosláv, publicado en 1847? Ése es de otro género. Mi Historia te debe mucho a ti, o sea, a las impresiones que produjiste, a los conceptos que despertaste con El inspector y con Las almas muertas, con la objetividad de los personajes.
Y mis otras circunstancias son muy adversas.
Tuyo, M. Pogódin.
¡Responde!
1Se refiere a los hechos revolucionarios de 1848.
2Investigaciones, observaciones y lecciones de historia rusa. Mijaíl Pogódin edita los primeros tres tomos (de siete) correspondientes a este trabajo en 1846. El cuarto tomo sale en 1850.
3Al parecer, el fragmento Yaropólk. Vladímir (M., 1848, No. 2, p. 103-128).
4Mijaíl Pogódin escribe sobre Gógol en su diario el 5 de enero de 1840: “Estos son los hombres vivos que necesita la historia”. En 1847, le escribe al profesor I.I. Davidov: “Pensé unos diez años en el tono de mi historia“ (Barsukóv, l. 9, p. 80).
Imagen: Rudolf Sosnin, Rostov the Great, 1990.